Michael Marc nació en Heidelberg, Alemania, donde tuvo su primera oportunidad de mostrar su talento musical en una actuación escolar a la edad de ocho años, frente a una audiencia de 200 personas. Este éxito temprano lo llevó a tomar la decisión de convertirse en guitarrista. Se ganó la vida tocando en clubes y fiestas privadas.
Michael comenzó a viajar a España para asistir a clases con John Williams. En Francia trabajó con maestros como Manuel Barrueco y Eduardo Falu. Se graduó en la prestigiosa "Hochschule für Musik des Rheinlandes" en Colonia, Alemania y comenzó a dar conciertos por toda Europa.
La forma de tocar de Michael Marc se basa en emociones y sentimientos en lugar de estructuras y tradición, algo que siempre lo preocupó durante sus estudios clásicos en Alemania. Trabajar con Barrueco y Falu confirmó su creencia de escuchar primero a su corazón.
"Puedes saberlo todo sobre música, pero si no lo sientes, el resultado no será música".
En uno de sus muchos viajes, Michael se enamoró de San Diego, California y decidió mudarse allí. Dejó su vida en Alemania y llegó a Estados Unidos con poco más que su guitarra en sus manos. Continuó creando su propio estilo de música de guitarra, que está influenciado por la música clásica, el jazz y el flamenco, y comenzó a grabar su primer álbum: Plaza de la Libertad, un homenaje a su "lugar de libertad".
Michael trata cada cuerda con un respeto individual, para extraer de su sonido único, sin descender nunca a una nube de ondas sonoras indefinidas. En cambio, traduce sentimientos sutiles en música, dando importancia a cada nota y desarrollando así una intimidad con su público. La guitarra se utiliza como un instrumento para revelar cada fase emocional de modo que ningún oyente pueda resistirse a su apasionado encanto.
La revista 20th Century Guitar Magazine lo llamó:
"Una sorprendente fusión de la magia de la guitarra acústica, la new age, el jazz y la guitarra clásica española... Las técnicas de guitarra clásica y flamenca de Michael Marc son deslumbrantes y totalmente cautivadoras".
La música de Michael ha aparecido en películas y televisión. Recientemente, la grabación de "What A Wonderful World" se utilizó en la serie de televisión Dexter (temporada 8, episodio 1). También escribió una canción para la serie de MTV "Wild Boyz" llamada "One For The Bulls".